Sentados en un banco del parque, conversamos. Él, con esa sonrisa que es como el destello de quien ha vivido y tiene el pensamiento muy pulido, sentencia:
-Que no, hacedme caso, el amor no existe. Existe solo el cariño. El amor es una palabra que han inventado los poetas.
-Los poetas?
-Los poetas, sí hija, los poetas. Existe el cariño, el afecto que sientes por alguien, pero esas palabras son muy largas: ca-ri-ño, no da para nada. Sin embargo Amor, AMOOORR, se les llena la boca con esa palabreja que no significa nada!
Él está sentado a mi lado, a la derecha. A la izquierda está mi hija, adolescente enamorada.
No estamos de acuerdo. Yo creo que en el amor, relaciono conceptos que le fruncen el gesto, me escucho pronunciando palabras como sufrimiento, libertad, renuncia. Diferenciando deseo, amor y sexo. Poniéndole mayúsculas al cariño para convertirlo en amor y hacerlo grande y extenso.
-Tonterías, insiste.
La niña calla porque está enamorada y no sabe salir de la dulzura. Su amor es certeza y causa y consecuencia.
-Tonterías, insiste.. y entonces sucede. Se acerca Nicolás que ha oído nuestras palabras llevadas y traídas como pájaros desde el columpio. Llega corriendo y abraza al abuelo, lo abraza muy fuerte apoyando la mejilla en su cintura. Se queda quieto. El abuelo se ríe, es una sonrisa humedecida y recién tallada. Le pasa la mano por la cabeza y acaricia su cabello encrespado cerrándolo también en un abrazo.
Nos quedamos callados porque ahí, tan fácil, está la razón.
Bestial!!
ResponderExcluirSi es que no se puede ir de duro, en seguidita te descubren... :)
ResponderExcluirUn gesto es mejor que todas las palabras del mundo, o casi, porque las tuyas nos traen todas las imágenes, vívidas, ricas...
ResponderExcluirbeijinhos, princesa
Eu ia tirar uma conclusão triste, mas o texto e a cena são muito lindos para tristezas.
ResponderExcluirora essa! beleza e tristeza sempre foram juntas! beijinhos.
ResponderExcluirEl amor....esa palabra (creo que con eso, cortazar lo dice todo)
ResponderExcluirComo estas? te gusto el libro?
Un beso muy fuerte!
Querida M.: estoy metida en el libro todavía. Lo dosifico, puede ser demoledor o todo lo contrario. Tienes párrafos sublimes, ideas/visiones que te sacuden por dentro como sacudimos las sábanas en la ventana por la mañana. Poco a poco. Sigo pensando en tu/mi/nuestra historia. Poco a poco. De momento mil gracias por haberme hecho desear ser piel roja!!!
ResponderExcluirCompletamente de acuerdo. Con el abuelo, claro.
ResponderExcluirNico es más feliz que el abuelo. bjs.
ResponderExcluirQuerida Pau, es un libro para leer a sorbos, intensa pero despaciosamente. Es dicifil expresar el dolor de una forma tan bella, y tan autentica; ciertamente arana el corazon.
ResponderExcluirEsta semana, en un atardecer amarillo y otonal, el recuerdo barrió como el viento los restos de ese amor enredado que ya no podra ser. Como si de pronto, el propio tiempo hubiera destilado sabiamente la luz, dejando al dolor prendido en una aleación de deshechos alquimicos. Que extrano tocarse a la altura del pecho y descubrir que algo late sordamente como un temblor o una promesa.
Viste? Compre pasaje a Budapest, ahora, dime, como sigue la historia?
A pequeños sorbos lo estoy leyendo y a veces preferiría tomarlo de un solo trago para terminar. Sí que hay dolor y reflexiones inquietantes, incómodas y muy cercanas. Me está gustando, pero tira muy fuerte para lugares a donde no querría volver. La historia continúa.
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